Solo hace falta un piano, en este caso un Yamaha CFX, para que un pianista de la talla de Juan Floristán llene de magia y arte cualquier espacio. Este fue el caso del concierto que ofreció en la Plaza de Nuestra Señora de la Estrella, en la localidad sevillana de Valenciana de la Concepción el domingo 23 de junio.
Floristán empezó con el Carnaval de Schuman y fue desgranando piezas de su repertorio a la luz de las velas y rodeado del respetuoso silencio del público, roto al final del concierto por aplausos que no cesaron hasta que el artista ofreció un “bis” de agradecimiento.
La imagen es de la web del Ayuntamiento de Valenciana de la Concepción, organizador del evento.